Un rayo de luna se escapa de tus ojos. El peligro se hace visible cuando estás cerca de mi. Nada más con el testigo de tu mirada enloquezco en un abismo de muerte. Mientras tú tan inocente, jugando a morir como si nada sucediera. Huyo como un esquizofrénico sin rumbo ni dirección y al llegar a mi destino me encuentras sin mucha dificultad. Una y otra vez me pregunto, ¿qué he hecho para merecer este castigo?, ¿será el tanto tiempo pensar en hacerme daño a mi mismo?
La distancia es mi mejor aliado, mi mayor deseo es el de desaparecer. Me escucho y me doy cuenta de que soy un hombre, debo actuar como tal. Siento que mis huesos se desvanecen y seguirán así hasta vencer a este demonio. Estoy seguro de que son sólo pruebas para aprender a ser un mejor humano y aprender a actuar. Te veo de frente, con aires de enemistad. Sin embargo sigo despierto, soñando con que lejos de mi estás. Así impongo mis barreras y me doy a respetar. Si es verdad que cada día estoy más loco, prefiero estar loco antes de vivir esa vida que llaman normal. Hoy la luna desaparece, aunque se que mañana otro día será.Etiquetas: cuentos cortos en español, ejemplos de microficcion, luna, microrrelatos, minicuentos, un cuento corto
